No compareció en la primera mitad el REBI Cuenca en casa del Abanca Ademar León. Bien es cierto que se enfrentaba ante uno de los equipos más en forma en casa, pero Cuenca llegaba con los ánimos de haber ganado los últimos dos partidos, y a pesar de no contar con un jugador tan importante como Pozzer, se esperaba más de los conquenses en León.
Un choque que se resolvió prácticamente en la primera mitad, en un partido donde Cuenca soñaba con ganar y llamar a los puestos de arriba, pero que se queda sin poder hacerlo, para volver a mirar abajo, donde el Frigoríficos Morrazo está a seis puntos, marcando la promoción de descenso tras ganar en Santander este sábado.
Y es cada parón es síntoma negativo para un REBI Cuenca que se vio superado por todo en la primera mitad, unos 30 minutos sin nada que rescatar, sin nada a lo que poder agarrarse ante un Ademar que fue mucho mejor y que pasó por encima, hasta el punto de irse al descanso con 19-9. Una diferencia de 10 goles que solo dejaba patente lo visto en la pista, y es que Cuenca estuvo tan mal atrás como delante, donde las pérdidas le fueron condenando poco a poco hasta dejar el choque visto para sentencia y sin nada en juego en la segunda mitad. Y eso que Lidio Jiménez lo intentó con dos tiempos muertos, con defensa 5:1, con ataque de siete y con cambios de piezas en la primera línea, pero ni así pudieron contrarrestar a un León intenso, que supo frenar a Cuenca y correr para ganar de manera clara.
Tras el paso por los vestuarios, aún hubo nuevo plan para los del REBI, con ataque con siete y con Sergio López liderando la primera línea junto a Juanjo y Tavares. Supieron al menos aguantar al Ademar y que la diferencia no creciera, aunque tampoco pudieron recortarla. Fueron los mejores minutos de los conquenses, que ya habían vendido su piel en la primera parte.
Salvaron, de alguna manera, los muebles acabando con el 37-27, que sin duda duele, y mucho, porque se esperaba más de un Cuenca que venía de dar su mejor imagen ante Blendio Sinfín y Valladolid, pero que no supo plantar cara a un rival como León. Ahora queda sumar el máximo número de puntos posibles lo antes que se pueda para poder salvar la categoría, estar tranquilos y afrontar la siguiente campaña. El próximo rival será el Logroño a las 12.30 horas del domingo en El Sargal, donde el REBI necesita y tiene que dar la cara para demostrar que lo de este 24 de marzo en León solo fue un accidente. Se puede destacar los minutos de Marcos Herraiz bajo palos, quien rindió a buen nivel en los últimos minutos.
FICHA TÉCNICA
37 - Abanca Ademar (19+18): Barkhordari (Álvaro); Carlos Álvarez (13, 2 p), Pestana (4), Popovic, Alberto Martín (1), Castro (6, 2 p), Casqueiro (4); Darío Sanz (1), Lodos (2), Santista (3), Rodrigo Pérez (1), Oliveira (1), Zapico, Miñambres, Samu Sáiz (1).
27 - REBI Cuenca (9+18): Espinha (Herráiz); Hackbarth (6, 4 p), Mach, Vera (2), Simonet (1), Fede Pizarro (1), Nacho Pizarro (3); Juanjo Fernández (3), Río, Tchitombi, Teixeira, Tavares (2), Arnau Fernández (5), Sergio López (4).
Marcador cada cinco minutos: 4-1, 7-3, 11-4, 13-6, 16-7, 19-9 (descanso); 23-12, 26-15, 29-18, 32-22, 35-25, 37-27.
Árbitros: Hoz Fernández y Riloba Pereda. Excluyeron dos minutos a Casqueiro, Miñambres, Oliveira y Santista, del Ademar; y a Juanjo Fernández, Tchitombi y Fede Pizarro, del Cuenca.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigésima segunda jornada de la Liga Plenitude ASOBAL disputado en el palacio municipal de deportes de León ante 1.856 espectadores.